Poema desesperado

Ansío memorizarte en las noches que vivo
como un sendero tozudo quiere llegar al camino

aparcado en un solitario parking ferroviario
tengo ganas de soñar, yo, el solitario

abro mi corazón al matinal y fresco rocío
porque tanta frialdad me hace sentir más vivo

fui abarcando deseos y ansiedades
consumiendome en ello sin ser consciente

siendo casi devorado por mi mismo
en un inconsciente trabajo destructivo

sueño con momentos de abrazos eternos
que vuelan invisibles a mi encuentro

anhelo sentir unos labios pegados a los mios
y no puedo vivir sin ellos

me alejo de multitudes egoistas y bárbaras
acumulo en mi alma, perdidas batallas

no siento, no respiro, casi me desvanezco
ante actitudes provocadoras y falsas

y me desvelo, y me arrepiento, y no sirve de nada
para que seguir buscando, donde estara mi alma?

si no me acompaña, sino esta conmigo
solo soy marioneta de las palabras

y aunque venza en batallas, perdí la guerra
nada que queda, ni siquiera esperanza

miro al espejo sin ver mi reflejo
ya no estoy, ya no existo, ya no soy nada

y estas palabras no existen, son otra patraña
ya casi no creo en un amor que exige, sin ofrecer calma

este es mi destino, este mi sueño mas obvio
y en el me diluyo, en el no encuentro consuelo

es hora de pensar en ir apagandome
la vida es mas dura de lo que soportar puedo

poemas, versos, ridiculos escritos
no aporto nada el mundo, soy mediocre y pedante

no quiero lástimas, ni tampoco susurros
quiero gritar al mundo mi desespero

Es tiempo de silencios, mucho me temo
es mejor callar, que hablar sin decir nada

Hace unas semanas, lei de nuevo a Neruda, el maestro, magnífico artífice de poesias con alma,
me descubrí, reflejado en muchos de ellos, y mi parte más oscura salio a la luz de nuevo. Este poema se basa en Neruda, en lo que sentí mientras leía asombrado, un homenaje a alguien que aun hoy, sigue siendo leido y enseñando con su lectura, acerca del amor sincero.